Homeopatía Clínica Revista de formación médica continuada Octubre/2000, Número 1

PURA MEDICA MATERIA

Medicamento o remedio

 

Dice un compañero -y sin embargo amigo- que allí donde hay dos Homeópatas surgen enseguida tres asociaciones. Y es que, aunque tenemos fama de corporativistas, somos probablemente el gremio que peores relaciones interprofesionales mantiene: cirujanos y médicos eternamente enfrentados, servicios enteros que no se hablan con otros servicios del mismo hospital, adjuntos querellados con sus jefes, envidias profesionales, rencillas...  
—“¡Apártate!, que brillas mucho y me quitas esplendor a mí”... 
En lo único que casi ”todos” los médicos se ponen fácilmente de acuerdo es... en desprestigiarnos a nosotros, los pobres médicos homeópatas “carentes de todo rigor científico oficial moderno”. 
Así nos van las cosas. Nos preocupa demasiado defender los intereses de nuestra escuela o de nuestro maestro; de nuestra forma de entender la profesión; de nuestra ideología; o, incluso, de nuestra religión. Se nos olvida defender la verdadera y única razón de nuestra existencia: ante todo y sobre todo curar al enfermo. 
A los muchos médicos ya no les interesa la Medicina: sólo el dinero o el poder que ella les proporciona. Por eso, cuando surgió la idea de crear la Sociedad Española de Medicina Homeopática como una sociedad científica, seria, integradora, no dogmática e independiente, me gustó la idea. 
Así entiendo yo las relaciones profesionales entre COMPAÑEROS: con rigor, pero con camaradería; con independencia, pero edificante. Y, claro, acepté formar parte de la junta constituyente. Como una cosa lleva a la otra, enseguida se habló de hacer una revista científica y de formación permanente. Y una vez más piqué y acepté estar en el comité de redacción la revista HOMEOPATÍA CLÍNICA.
 La revista se puso en marcha. Entonces me pidieron que me hiciera cargo de un artículo de opinión... y, claro, aquí está. La última reunión del comité de redacción de la revista HOMEOPATÍA CLÍNICA reprodujo fielmente una de las frecuentes polémicas de nuestra querida especialidad: ¿debemos los homeópatas ser fieles a nuestros maestros "ad fide" o debemos adaptar nuestra terminología al paso del tiempo? ¿Es —debe ser— la homeopatía una ciencia cerrada en su historia o una ciencia dinámica que se adapta y evoluciona?. Miasma, Materia Médica, Remedio, Psora... son palabras que han perdido su uso científico para la Medicina Oficial, quedando únicamente como anécdota en los manuales de Historia de la Medicina, pero son de total vigencia en algunas escuelas homeopáticas bastante reacias a los cambios y fieles a la terminología del Fundador.
 Las palabras, en sí mismas, no tienen mayor importancia, sólo denotan la evolución y el dinamismo de un lenguaje que está vivo y la gran influencia de los medios de comunicación. El debate está en nuestro medio y es difícil no tomar partido: por una parte el argumento, absolutamente válido, de que debemos usar la terminología científica al uso para hablar con nuestros compañeros médicos no homeópatas de igual a igual, para que nos entiendan, y para que su argumentación no pueda ser demagógica sino únicamente científica. Por otra parte, está la fidelidad a los orígenes, la pureza del lenguaje y la amplitud de matices del mismo. En medio de esta polémica, yo tomo partido al menos por una palabra: prefiero recetar Remedios Homeopáticos antes que Medicamentos Homeopáticos. 
La razón la tengo muy clara. El Diccionario de la Real Academia Española de la Lengua, en su vigente edición (la vigésimo primera) define Remedio como: "MEDIO que se toma para reparar un daño o inconveniente", y —en su acepción cuarta— como: "LO que sirve para producir un cambio favorable en las enfermedades". Sin embargo define Medicamento como: "Cualquier SUSTANCIA que administrada interior o exteriormente a un organismo animal, sirve para prevenir, curar o aliviar la enfermedad y corregir o reparar las secuelas de ésta". Por eso yo, cuando prescribo fitoterapia o alopatía receto medicamentos y cuando prescribo homeopatía... sigo recetando remedios.